Pequeña historia del Té (tradiciones - etiqueta).


Cuenta la historia que el emperador de la dinastía Qing, Qiang Long, le gustaba tanto beber té como viajar, y cuando viajaba ocultaba su identidad. Un día  el emperador y su séquito viajaron a Jiangnan y entraron en una casa de té para descansar. Un camarero puso una taza sobre la mesa, luego dio unos pasos atrás, tomó un hervidor de agua y la vertió en la taza. El agua, como una línea fina, entró en la taza sin derramar una gota.

Qiang Long tenía curiosidad y quiso intentar imitar al camarero así que tomo el hervidor t vertió el agua en la taza de su séquito. En la antigua China la gente tenía que arrodillarse y tocar el suelo con la frente como muestra de agradecimiento hacia el emperador.

El séquito quiso dar las gracias a su emperador, pero no pudo arrodillarse para no desvelar su identidad. Así que doblaron dos dedos de la mano imitando a dos piernas haciendo una genuflexión e hicieron tres golpecitos en la mesa. Luego el emperador les preguntó por qué habían hecho aquello, a lo que respondieron "No podemos arrodillarnos, por eso sustituimos las piernas por dos dedos de la mano, para arrodillarnos metafóricamente y agradecerle su gesto".

Desde entonces esa acción se difundió por toda China y sigue viva hasta la actualidad.

El ‘dedo kouto’, así le llaman (velu kovto) se ha convertido en un símbolo y una forma práctica de decir xie xie (gracias) al camarero que sirvió el té.

Este método también se considera ideal porque uno no necesita decir verbalmente «gracias» porque interrumpe la conversación en curso.


En China, aquí hay 3 etiquetas que debe conocer sobre tocar el dedo al servir el té:

1. Si alguien más joven le está sirviendo té, use un dedo (índice o medio) para tocar la mesa una o tres veces si aprueba al mesero. Alternativamente, también puede tocar el borde de la copa con un dedo.

2. Si un amigo te sirve té, usa dos dedos (índice y medio) y golpea tres veces la mesa para mostrar respeto.

3. Si algún anciano derrama té Por ti mismo, aprieta el puño y golpéalo suavemente tres veces sobre la mesa. Representa los cinco cuerpos inclinándose hacia la tierra en honor a los mayores. Por lo general, el anciano que sirvió el té daría un ‘Velu Kovto’ a cambio.

 

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